sábado, 7 de marzo de 2009






Cuanto más se torna moderno el hombre moderno más desprovisto está de defensas contra el terror a la historia y más difícil se le hace hacer la historia.
La libertad de hacer la historia es sólo factible en una mínima elite. Al resto le queda a lo sumo la libertad de oponerse: suicidio, destierro, evasión, vida subhumana.


"El mito del eterno retorno"